Abordaje multidisciplinar del cáncer de hígado

La importante evolución en la investigación oncológica de las últimas décadas, ha supuesto que las posibilidades de tratamiento del cáncer de hígado sean variadas y complementarias. Así, en función del estado y la situación general del paciente, podrán combinarse o realizarse de manera secuencial cirugías, diferentes tipos de tratamientos farmacológicos o tratamientos radiológicos/radioterápicos ...

Además, estas medidas clínicas se acompañarán de otros cuidados y recomendaciones complementarias como medidas nutricionales o actividad física adecuada al estado de cada paciente con cáncer de hígado. 

En el cáncer de hígado no existe un único tratamiento, ni un único especialista. Los pacientes son atendidos por distintos profesionales de diferentes especialidades con el fin de cubrir todos los aspectos y fases de la enfermedad, para así ofrecer un mejor cuidado y atención. Este planteamiento multidisciplinar comienza desde el mismo momento de la confirmación del diagnóstico y de la decisión del inicio del tratamiento llevada a cabo en la mayoría de las ocasiones por el Comité de Tumores.

¿Qué es el Comité de Tumores?

Los Comités de Tumores están constituidos por miembros de diferentes servicios que pueden incluir, entre otros, a profesionales de digestivo/hepatólogos, oncología médica, oncología radioterápica, cirugía, radiodiagnóstico y anatomía patológica. Este grupo de profesionales es el encargado del abordaje multidisciplinar del paciente.

En forma de sesiones de trabajo, los comités se reúnen periódicamente y en ellos se evalúa de forma individualizada cada caso, analizando las características de cada paciente y debatiendo las diferentes alternativas terapéuticas posibles hasta acordar cuál es el abordaje óptimo.

Los Comités de Tumores tratan de dar un enfoque sobre la planificación global del tratamiento del paciente (a corto, medio y largo plazo); además constituyen una herramienta eficaz a nivel organizativo para adecuar la secuencia de las actuaciones de los distintos especialistas.

Además de los anteriores, existen otros profesionales fundamentales en la atención del paciente con cáncer de hígado, como pueden ser:

• Enfermería especializada en hepatocarcinoma: servicio esencial en el cuidado de los pacientes. El servicio de enfermería asegurará un constante y apropiado asesoramiento y seguimiento. Además, favorecerá el reconocimiento temprano de posibles situaciones de emergencia o las complicaciones del tratamiento. Por su cercanía con los pacientes y familias, suelen constituir un auténtico apoyo psicológico.
• Nutrición y dietética: la nutrición del paciente oncológico debe ser considerada parte esencial en la valoración global desde el momento del diagnóstico de cáncer de hígado con objeto de prevenir las alteraciones nutricionales derivadas de la pérdida de funcionalidad.
• Apoyo psicológico: el elevado impacto tanto para el paciente como para su entorno que puede generar el diagnóstico de cáncer de hígado, puede hacer que se precise ayuda profesional para comprender y aceptar la situación con objeto de afrontar de la mejor manera posible el tratamiento.

Finalmente, sin pertenecer propiamente al equipo de profesionales que tratan la enfermedad, cabe destacar el importante papel que juegan las asociaciones de pacientes como la Federación Nacional de Enfermos y Trasplantados Hepáticos – FNETH. Para los afectados y sus familias, el compartir experiencias similares, además de ofrecerles un gran apoyo a nivel de comprensión de la enfermedad, les supone una gran ayuda en cuestiones logísticas y recursos disponibles.