Todas las sesiones de yoga finalizan con un momento de relajación total de unos diez minutos.
Yoga para pacientes oncológicos
Relajación,
estiramientos y cancer
El yoga es una actividad que brinda beneficios tanto para el cuerpo como para la mente y puede ser parte de los cuidados durante y después del cáncer. Es una actividad física y espiritual destinada a unificar cuerpo y mente. Su práctica combina movimientos corporales controlados con técnicas de respiración y meditación.
Hay diferentes tipos de yoga y todos tienen el mismo objetivo: El bienestar de cuerpo y mente . Es accesible para todos, desde niños hasta ancianos, independientemente de su estado de salud.
¿Qué beneficios puede aportar el yoga a un paciente?
El deseo de encontrar una vida más serena y un equilibrio físico y mental a raíz de la enfermedad y sus tratamientos, son las principales motivaciones para la práctica del yoga en pacientes.
Algunas técnicas de estiramiento de yoga te permitirán:
Reducir el dolor articular y muscular que puede ser causado por los tratamientos.
Mejorar la calidad del sueño, haciendo que el organismo sea más resistente.
Todas las sesiones de yoga finalizan con un momento de relajación total de unos diez minutos.
Para hacer esto, acuéstate boca arriba con los brazos y las piernas separados y las palmas de las manos hacia el techo. Cierra tus ojos. Si tienes la espalda sensible, puedes colocar un cojín debajo de las piernas. También puedes cubrirte con una manta ligera. Concéntrate en tu respiración que debe ser regular y ventral.
Toma conciencia de la sensación de tu cuerpo y de su
inmovilidad.
Persigue mentalmente todos los puntos de tensión, zona por zona, desde la cabeza hasta las puntas de los pies. Después de unos momentos, reactiva gradualmente la respiración torácica, vuelve a colocar los brazos a lo largo del cuerpo y abre los ojos.
Puedes aprender con un profesor, en un grupo o en clases individuales, y si lo deseas pregunta a tu médico, a tu hospital o a alguna asociación contra el cáncer.
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