¿Qué son los Tratamientos Tumor Agnósticos?

La imparable evolución de la investigación oncológica, determinada por la búsqueda de mejores tratamientos para los pacientes, unido a los avances en el campo de la investigación genética, ha provocado en muy poco tiempo el desarrollo de novedosos conceptos ampliamente relacionados entre sí. Así, se ha pasado de términos que todo el mundo conoce, como quimioterapia, radioterapia o cirugía, a otros que empiezan a ser comúnmente utilizados como “inmunoterapia” “terapia biológica”, “terapias dirigidas o de precisión” o “medicina personalizada”.

Uno de los conceptos clave para entender esta nueva forma de abordaje oncológico es el de las “Terapias dirigidas o de precisión”, fármacos que actúan en moléculas concretas, las denominadas “dianas terapéuticas” que reciben la acción de los fármacos evitando así “impactar” en las células sanas. Las terapias dirigidas se encuadran en el término de “Medicina personalizada o de precisión”, algo más genérico y amplio e implica la administración del medicamento más efectivo en función de las características individuales de cada paciente.

Es en este entorno donde surge un nuevo concepto que va a estar cada vez más presente en la oncología: los tratamientos “Tumor Agnósticos”. Los tratamientos tumor agnósticos suponen un gran avance en la investigación y el abordaje oncológico, ya que son fármacos desarrollados para actuar en función de una alteración molecular concreta con independencia de que el tumor primario haya aparecido en el pulmón, en el colon o en el estómago.

Conceptualmente, supone un cambio importante en el manejo del cáncer, que pasa a estar determinado por el perfil genético del tumor, disminuyendo el protagonismo del órgano en el que se produce. Esto supone, además, una implicación también en el tipo de terapias que se administran al paciente. Estas son más efectivas, dado que han sido diseñadas para actuar sobre la alteración molecular que ha podido generar el tumor.

Estos tratamientos dirigidos podrán inducir respuestas más eficaces y con menos efectos secundarios que otros tratamientos como la quimioterapia (que es inespecífico y afecta tanto a células tumorales como células normales).

Desde el punto de vista diagnóstico, un mayor conocimiento de los genes alterados responsables de que las células sanas se conviertan en células tumorales, va a permitir mejorar el pronóstico y facilitará la elección del tratamiento más adecuado.